Antiguas leyendas mágicas aseguran que quien permite
que las babas de caracol estén en la puerta de su casa, jamás conocerá la
desgracia y recibirá suerte al instante. Otro ritual para atraer la suerte en nuestra casa o vida consiste en trazar un cuadrado con la
baba de caracol en la parte trasera de la puerta principal de nuestra vivienda. Finalmente, otro sencillo ritual consistía en dejar la
cáscara vacía de un caracol cerca de la cama para ayudarnos a conciliar el
sueño y evitar pesadillas. El caracol entiende el valor del movimiento lento y nos
enseña cómo usar ese movimiento a nuestro favor. Contiene las enseñanzas de la
paciencia, la perseverancia y el respeto.
Estos retales místicos con el caracol como protagonista proceden del estado de Tamaulipas, uno de los 31 estados que junto con el Distrito Federal conforman las 32 entidades federativas de México.
info e imagen: redescolar.ilce
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